Alonso Pulido Martín
Empresario, Formador y Escritor.
Creador y director de Ahumor; Amor y Humor en la Educación y Empresa, autor de los libro «Amor y Humor en la Educación», «La Remontada: Una Vacuna de MotivAcción para tu Vida/Empresa», «365 Reflexiones con Ahumor» y co-autor del libro «El Mundo de los Emprendedores» y «Risoterapia Global».
Ya está bien…
Ya es hora de…
darnos cuenta que hemos estado expuestos a creencias escuchadas de la boca de personas muy influyentes para nosotros, que con su mejor fe, nos han enseñado de la misma forma que sus antepasados lo hicieron con ellos. Como el hábito de darnos la mano para cruzar la calle cuando teníamos 3 añitos, ya no nos vale, con 30, 40 o 50 años. Hay otras muchas creencias ya caducas que no nos suman.
Vamos a replantearnos nuestra propias creencias, así que vamos a parar para reparar. Vamos a reflexionar sobre cuantas y cuáles de nuestras creencias nos están haciendo bien y cuáles no, para ir disminuyendo progresivamente la probabilidad de repetir las que no nos ayudan en nuestro crecimiento.
Te invito a ser consciente de esos aprendizajes, que no nos aportan y ponerlos por escrito, hacer un listado de aquellos que queremos cambiar, para después proporcionarles una alternativa positiva, que llevaremos a la práctica para que nos hagan más agradable nuestro día a día.
Ya está bien de juzgar por anticipado…
De que no dejemos que un mal momento nos haga sentir como si tuviéramos una mala vida, recordemos que el momento es el que es, pero que es transitorio, será para bien y que con el tiempo ese momento nos traerá un aprendizaje y nos habrá hecho más fuertes y más sabios.
Recordemos que si la montaña que subimos parece cada vez más imponente es que la cima está cada vez más cerca, así que cuando una caída te haga replantearte el abandonar, recuerda porque empezaste y vuelve a intentarlo una vez más, ten presente que los ganadores nunca abandonan y los que abandonan nunca ganan.
Si estás atravesando por un mal momento sigue caminando… lo malo es el momento, no tú.
Ya está bien de pensamiento inútiles y pesimistas…
De cambiar nuestro pensamiento habitual por el de “Piensa bien y acertarás”. Que hubiera sido de nosotros si en nuestro disco duro hubiéramos tenido esta frase más optimista, en cuantas ocasiones hubiéramos puesto más atención en lo positivo que en lo negativo y por tanto, cuantas cosas hubiéramos dejado de “creer” y por tanto “crear” en nuestra realidad. Nos hubiera evitado haber perdido mucho tiempo de paz por un resultado que, independientemente de una u otra opción tomada, siempre termina siendo lo que tiene que ser, pero al menos en el trayecto no hubiéramos estado constantemente pre-ocupados. Y recordemos que “Preocuparse es rezar para que suceda lo que no quieres que ocurra”
Ya está bien de NO adaptarnos a la incertidumbre…
De aceptar y Adaptarnos a que,”lo que es… es y resistirse es una locura”, no desde la resignación, la rabia o el pesimismo, sino desde la tranquilidad, la confianza y el optimismo, teniendo presente que al final todo saldrá bien y que si aún no sale es porque todavía no es el final. Cuando somos capaces de sentir esa confianza interna de que todo irá bien aún en esos momentos en los que no lo aparenta, la solución está más cerca y el sufrimiento mientras llega es mucho menor.
Cuando todo va bien y estamos en la zona de confort, crecemos poco, aprendemos lo justo y evolucionamos mínimamente, pero en estas situaciones cargadas de incertidumbre y aparentemente menos positivas, florecen en nosotros todas nuestras cualidades internas, que en momentos más cómodos no utilizamos y desconocemos de nosotros mismos, nos hacemos más pacientes, más tolerantes, más flexibles, sacamos nuestra mejor versión como seres humanos. Tenemos que practicar el sentirnos cómodos en la incomodidad.
Ya está bien de no arriesgar…
De hacernos preguntas como: ¿Y si en vez de pensarlo, lo intentas? ¿Y si en vez de decirlo lo haces?¿Y si en vez de soñarlo lo haces realidad? No te mueras con la música dentro, la vida es muy corta y ya no estamos en edad de quedarnos con las ganas se saber que hubiera pasado.
Obsérvalo y haz un repaso de tu vida en función de tus decisiones, ¿sueles decidir casi siempre de una forma cómoda, parecida y exenta de riesgo?, ahí está la cuestión. Para modificar nuestro camino debemos tomar algún cambio, acción o riesgo, sólo así modificamos el resultado.
Cuando imaginar que ocurra algo te hace sentir feliz y a la vez te da un poco de miedo es porque es eso exactamente lo que necesitas en tu vida, así que recuerda que quien no arriesga no gana y puedo confirmarte por experiencia personal que merece la alegría jugársela… toma acción ya y no le des tantas vueltas.
Porque el mayor riesgo es no tomar ninguno, porque todo lo bueno comienza con un poco de miedo, te invito a que no te quedes con las ganas de saber que pasaría. Lánzate, vive, atrévete, que si de los éxitos se disfruta de los errores se aprende.
La vida es una aventura o no es nada… Arriésgate. Si no juegas con fuego te morirás de frio, porque solo avanza, quien echa a andar y solo los que arriesgan yendo demasiado lejos, pueden encontrar lo lejos que pueden llegar.
Déjame compartir contigo una fórmula que siempre tengo presente y que me ha ayudado muchísimo a gestionar mi negocio y mi vida, “CAMBIO + ACCION + RIESGO = BENEFICIO” porque arriesgándonos a perder, a lo mejor lo ganamos todo. ¿Y si sale mal?… Sí, pero… ¿Y si sale bien?
Ya está bien de …
.- de seguir sufriendo
.- de vergüenza y sentido del ridículo
.- de no tomar decisiones
.- de pensar más que intuir
.- de tomarnos la vida tan en serio
.- de postergar la felicidad
Ya es hora de…
Tomar Acción, no poner tu vida en lista de espera y poner un poco más de Amor y Humor en tu vida y en la de los que amas y por los que dices… Darías la Vida ¡
No hace falta dar la vida por nadie, que tal regalarles una dosis de Ahumor.
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